Un colegio sueña con reencender 50 máquinas dañadas por el agua

 
Related

El día del pirata se anticipa al día de los enamorados

De todo un poco
3774 points

El Papa recibió a la madre del argentino condenado a muerte en EEUU

De todo un poco
2332 points



Most recent

cCommerce: La nueva tendencia de venta para los eCommerce

Tecnologia
12 points

2023, un año de florecimiento y consolidación para Confiar

Prensa
10 points

SICÓPATAS MAYORES

Octavio Cruz Gonzalez
12 points

Evento anual British Council Partner Schools 2024: liderazgo reflexivo en la era de la IA

Prensa
22 points

¡Datos sin miedo al frío ni al calor! Kingston presenta SSD todoterreno para ambientes extremos

Prensa
16 points

¿Cómo y en qué casos puedes contratar a un detective privado?

MaríaGeek
16 points

Nexsys amplía su oferta con Kingston FURY, la nueva joya de la memoria RAM para gamers

Prensa
14 points

Usos de Home Assistant que te facilitarán tu vida

MaríaGeek
16 points

'La Magia del Color': una ventana a la vida rural del Caribe colombiano

Comunicaciones
10 points

Pure Storage ofrece nuevas capacidades de gestión de almacenamiento de autoservicio

Patricia Amaya Comunicaciones
26 points
SHARE
TWEET
Dos docentes de la Técnica Nº 8 encararon con los chicos del trabajo un trabajo literalmente artesanal, que consiste en desarmar, revisar y tratar de recuperar los elementos de los talleres que el 2 de abril quedaron tapados por el agua.

Un colegio sueña con reencender 50 máquinas dañadas por el agua

“Para que vayan al recreo los tenés que echar, porque se quieren quedar trabajando”, cuentan sobre sus alumnos Domingo Vergalito y Daniel Rodríguez, docentes de la Escuela Técnica N° 8, quienes hace unos días encararon con los chicos del colegio un trabajo literalmente artesanal, que consiste en desarmar, revisar, limpiar y tratar de recuperar las máquinas-herramientas de los talleres que el 2 de abril quedaron tapadas por el agua. Es una tarea que llevará meses y que están aprovechando para que los adolescentes aprendan.

Antes de poner en marcha esta iniciativa, los docentes de la institución de 7 y 526, con la ayuda de muchos padres, tuvieron que realizar una limpieza a fondo de los pisos y las paredes, que habían quedado impregnados por la grasa y el aceite de las máquinas.

Seis limadoras, cuatro tornos paralelos, seis fresadoras universales, amoladoras, serruchos mecánicos, sierras circulares, agujereadoras de banco. Todo debe pasar por el “lento y prolijo proceso de desarmado y limpieza, para saber si los motores, 52 en total, están quemados y no sirven más, o bien se los puede recuperar”, subrayó Vergalito, y explicó que “estamos verificando a razón de dos motores al día. Y es que aquí manejamos los tiempos de una escuela, no de una empresa que podría hacer esto en unos días”.

Esta mañana era el turno de los alumnos de 5° año de Electromecánica II. Al lado negativo de la situación, Nahuel le buscaba una veta optimista. “Aprendemos a desarmar una máquina y vemos cómo es por dentro, la limpiamos con gasoil, la lubricamos, medimos el voltaje”, enumeró el joven.

Enzo, Facundo y Ezequiel también dijeron que “ayudando a poner el colegio en condiciones vamos aprendiendo”, a la vez que destacaron que “están trabajando todos los grados, ninguno se queda parado”.

Los docentes calcularon que el bobinado de un motor ronda los 1.200 pesos, mientras que uno nuevo cuesta más de 5.000.

Es por ello que todos ponen la mayor dedicación a la hora de encarar el trabajo. “Todo debe hacerse de forma muy ordenada -dicen los docentes-. Luego de limpiar las máquinas (que dejan ver aceite mezclado con agua, arenilla y hasta hongos), se sacan los motores y se desarman, se numera cada pieza, cada tornillo, para que no haya errores a la hora de rearmarlos, se lavan con un líquido desengrasante y se dejan 24 horas con una lámpara incandescente tapada con una tulipa. Si se conectan antes, directamente se queman. Recién después de realizar todo ese proceso se puede saber si están quemados o no. Por ahora perdimos cuatro, que eran los de las bombas que suministran agua corriente a la escuela”, detallaron y añadieron que “también se perdieron tres bombas eléctricas que cumplen la función de refrigerar la maquinaria”.

Una vez seco, si se comprueba que el motor se puede salvar, se barniza el bobinado, se cambian los rodamientos y “queda como nuevo”, dicen con aires de esperanza en la Técnica 8, una institución que tiene una matrícula de más de 1.200 alumnos



Fuente: www.eldia.com.ar
SHARE
TWEET
To comment you must log in with your account or sign up!
Featured content