Domingo: 30 de Julio del 2019 l La pura verdad de ayacucho
Los caminos rurales bonaerenses están peor en 70% de los casos
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Lo denunció Carbap. La red vial de tierra 'está maltratada por la dinámica natural de la producción y mal atendida por los gobiernos'.
El primer encuentro sobre caminos rurales, realizado en 2018, buscó poner en evidencia un problema grave para los productores agropecuarios y allí bocetar soluciones posibles. Un año después, en el Segundo Simposio de Caminos Rurales, el balance deja a la vista que las dificultades son las mismas y aún peores con impacto directo no solo en la actividad económica vinculada al campo sino en las condiciones de quienes todavía intentan mantener sus familias tranqueras adentro.
"El relevamiento anterior nos describía que el 67% de los caminos estaba en condiciones regular o mala y el actual nos lleva ya al 70%", dijo el presidente de la Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (Carbap), Matías de Velazco.
Más de 300 participantes tuvo esta reunión que se desarrolló en la Sociedad Rural de Rauch. Además del crítico diagnóstico, se propusieron visibilizar la situación cuanto se pueda. Por eso apelarán a redes para, un día por semana, con fotos, videos, datos y geolocalización contar lo que viven día a día los productores y sus familias. Todo a la espera de que el Estado responda.
"Estamos en 2019 y vivimos como en el pasado", insistió de Velazco al advertir que la red vial de tierra adentro está maltratada por la dinámica natural de la producción y mal atendida por los gobiernos municipales, responsables de las obras -como mínimo- de mantenimiento.
Bernardino Capra, profesional de la Asociación Argentina de Carreteras, fue drástico en el balance y contundente en el paso que se debe dar. "Estamos peor que el año pasado, no hay dudas", dijo durante uno de los paneles de la tarde. Y planteó que cualquier instancia para recuperar la denominada red vial terciaria "exige un plan como mínimo a diez años, y con cuatro o cinco para ver los primeros resultados".
Durante este simposio se informó que los municipios recaudan unos 7100 millones de pesos en concepto de la denominada tasa vial. Pero apenas una mínima parte vuelve en obras para los aportantes, que son los propios productores rurales. Titulares de sociedades rurales confiaron que en algunos casos aportan sobretasas solicitadas por municipios. Tampoco funciona: "lo que se aporta no alcanza y mucho menos llega a verse en las mejoras que pedimos", dicen, resignados.
Ya el año pasado se había apuntado duro contra los jefes comunales, que en su mayoría recaudan pero no responden. En este encuentro asomaron los que han encontrado alguna opción que conforma algo más a su gente. Maximiliano Suescun, intendente de Rauch, explicó que encontraron una alternativa para mejorar la inversión en caminos rurales. Convocó a una Comisión de Asuntos Rurales y así involucró a los productores. Allí les pudo hacer entender que la administración municipal requiere casi el 85% de sus ingresos -incluida la tasa vial- para pagar sueldos. "Entre todos buscamos una solución", dijo.
Así, poco a poco, pasaron de un par de máquinas maltrechas a una docena de motoniveladoras. Dice que necesitan una cada 100 kilómetros de camino rural. Y también mejoraron la logística. "Repusimos los puestos camineros, con el empleado vial que está siempre con su máquina y vive en el tramo que le toca atender", describió Suescun. Rescata esa situación porque ese trabajador público convive con el beneficiario de las mejoras. "Hay un control social", remarcó.
Hugo Rossi, subsecretario de Coordinación de Políticas de la Secretaría de Agroindustria de la Nacion, dijo que desde ese nivel de gobierno se aporta y asiste cuanto se puede. Hay ayudas con maquinarias y ejecución de algunas obras complementarias. Reconoció que los municipios, responsables principales, destinan la mayoría de sus recursos en pago de sueldos. "De lo que aporta el productor es poco lo que vuelve al campo en obras", admitió.
Por Darío Palavecino