El mundo actual, tan tecnologizado, quiere obligarnos a ser como a él se le sale de los cojones/balones, pero habemos muchos que no estamos dispuestos a seguir por donde los ilustres de este planeta quieren llevarnos.
n fin, el asunto es que, como ni nosotros estamos dispuestos a ser conducidos como borreguitos con nariguera a su matadero, ni ellos querrán renunciar a sus pretensiones de "todopoderosos dioses", pues creo que lo mejor es hacer lo que dice la Biblia: ¡salíte dihái!
¡Chao!