El polémico doctor norteamericano Jeff Bradstreet, promotor del movimiento antivacunas, ha sido hallado muerto esta semana en Carolina del Norte (EE.UU.), según informa Associated Press. El cuerpo tenía un disparo en el pecho, y fue encontrado en un río por un pescador.
Las autoridades locales indican que habría sido un suicidio. El suceso cobra en España especial relevancia en un momento en el que la sociedad sigue conmocionada por la muerte por difteria este pasado sábado del pequeño de 6 años de Olot, al que sus padres no habían vacunado. El pequeño Pau no pudo superar las complicaciones provocadas por el efecto de la toxina de la enfermedad en sus órganos.
Bradstreet por su parte inició en su día un movimiento antivacunas global. Su hijo es autista y él lo achacaba a una vacuna que se le administró al pequeño cuando este tenía tan solo 15 meses de edad. Tras este suceso, él se dedicó a investigar y llegó a publicar un artículo en el que aseguraba que las vacunas producían este trastorno. La comunidad médica estadounidense se había manifestado en contra de sus afirmaciones. Pese a todo, su mujer ha creado una web con su nombre donde agradece a toda la comunidad autista el apoyo que han mostrado por su marido, al que califica de un «gran visionario del autismo».
Fuente: www.abc.es