El atleta jamaiquino entró en la historia grande del olimpismo en los Juegos de Pekín 2008. Con un récord de 9,69 en los 100 metros, se convirtió en el hombre más veloz del mundo.
Usain Bolt confirmó ser el "Rey del Atletismo" con sólo 21 años y agrandó su reinado al vencer sin atenuantes en los 200 metros, con nuevo récord del mundo (19,30), para destronar a toda una leyenda: Michael Johnson.
Antes de ese éxito, en la prueba de 100 metros superó su propia plusmarca histórica de 9,72 tras partir penúltimo. Y días más tarde, logró su tercer récord olímpico en los relevos 4x100 (37,10).
Se consagró como el primer atleta en ganar tres pruebas olímpicas desde las conseguidas por Carl Lewis en 1984. Y en 2010, superó sus propios récords absolutos de 100 m y 200 m lisos con registros de 9,58 y 19,19 durante el Mundial de Berlín.
Con sus 1,97 metros de altura, sus 76 kilos de peso, su estilo antiestético y una impactante zancada, en Jamaica lo aclaman como un verdadero dios del deporte. Es por eso que cada vez que visita su país, termina rodeado de tentaciones contraproducentes para su carrera deportiva.
"Soy joven. ¡Qué le voy a hacer!...", se defiende Bolt, de 25 años, ante los reproches sobre sus excesos. La última fiesta en la que participó finalizó con su automóvil incrustado al costado de una carretera.