El 13 de julio de 1375 se produjo la mediación del Valle de Ansó para el Tratado de las Tres Vacas entre roncaleses y bearneses, renovado anualmente.
Estamos hablando del tratado en vigor más antiguo de Europa, siendo declarado en 2011 por el gobierno de Navarra Bien de Interés Cultural Inmaterial.
El Valle del Roncal colindaba con el Valle de Bearn. Sin embargo el Valle de Bearn formaba parte del reino de Francia y el de Roncal del reino de Navarra.
Esto ocasionó continuas rencillas en ambos y enfrentamientos por la delimitación de las fronteras y el uso de los pastos fronterizos. Hay constancia de disputas desde el siglo XIII, siendo inútiles los intentos de conciliación.
El punto álgido del conflicto tuvo lugar en el 1373, llegando a producirse una auténtica guerra entre los roncaleses y bearneses que dio lugar a la Batalla de Aguincea en la que cayeron 53 roncaleses y 200 bearneses. A consecuencia de esto, los bearneses pidieron una tregua.
La situación era insostenible y era necesario un acuerdo. Se reunieron procuradores de los concejos roncaleses y los “hombres buenos” de Bearn en Ansó, municipio pirenaico que no estaba situado ni en Navarra ni en Francia, sino en el reino de Aragón.
Desde entonces, los bearneses entregan todos años tres vacas a los roncaleses. Aunque en la actualidad, los roncaleses no se quedan las vacas, sino que después del ritual las devuelven y reciben una suma que iguala el valor de las vacas en el mercado actual.