Pasaron unos años desde que aparecieron los auriculares sin cable. Cuando aparecieron todos dudábamos. ¿Esas cosas chiquitas en nuestro oído? Son muy chiquitas! Hoy compré mis primeros y empezando a utilizar los
freebuds 4 te cuento cual fue mi análisis para pasarme del viejo modo de escuchar a esta nueva tendencia.
1. Adiós enredo de cables
¿El motivo más evidente quizás? Con los auriculares con cable sucede una magia que nunca lograremos entender. Terminas de correr y lo guardas en tu bolsillo. Dos días mas tarde los retiras del mismo bolsillo y, como por arte de magia, aparece un enredo que nos pone al menos un minuto con los ojos bizcos tratando de entender por donde pasar esa partecita debajo de la otra. No importa cuanto te esfuerces en guardarlo. Los cables se las ingenian para cruzarse entre ellos.
2. El tironeo del cable deja de existir
¿Crees que el auricular se desprende solo? En realidad... no! La mayoría de las veces es porque tenemos una tira de cable colgando susceptible a cualquier tironeo. Sea porque te agachas y quedan colgando, porque corriendo posicionas mal el brazo o como el típico caso de viaje que al girarte lo dejas enganchado entre tu hombro y asiento.
No voy a mentir. Todavía guardo la sensación de que se me caen y pierdo mi auricular. Pues bien. Aparentemente es solo una sensación porque vienen, la mayoría, con estudios ergonómicos de tal forma que se ajusten al oído y logrando que las probabilidades de desprendimiento sean mínimas. Incluso corriendo y con traspiración.
3. El corte del cable en el plug es historia
En mi caso particular lo sufro constantemente. Me dispongo a escuchar y ese momento odioso que empiezo a escuchar de un solo lado. Muevo el cable de un lado para el otro... y si señores. Se escucha... por unos segundos. Nuevamente el mismo diagnóstico. Al filo del plug el cablecito roto. Mi peor experiencia fue que me duraran 2 semanas en un viaje. Este error tan frecuente se debe a la delicadeza de los cables y la rigidez al ingresar al plug.
¿Alguna vez probaste arreglarlos? Con mi espíritu de arréglalo todo lo he intentando varias veces. Te ahorro un paso: es muy complicado! Son muy finitos y lograr la continuidad es misión imposible.
4. Escuchar a distancia de tu dispositivo
Si los anteriores motivos te hacen pensar en las deficiencias en el uso este motivo trae, en realidad, un plus de usabilidad. Antes no nos planteábamos no estar con el dispositivo sobre nosotros. Naturalmente desde el momento que comenzamos a normalizar el walkman este debía estar en alguna parte de nuestro cuerpo: en la mano, bolsillo, cintura (años 80-90). Los auriculares inalámbricos al usar tecnología bluetooth nos permiten dejar el dispositivo en otro lado y disponer de
libre movilidad. Super cómodos a la hora de hacer ejercicios físicos. Por ejemplo: las flexiones de brazos. El celular termina en el piso si tenemos un cable conectado, aceptando la suciedad del gimnasio. Así en la mayoría de las situaciones de físico en contraste con dejar el dispositivo en algún lugar seguro. Actualmente la tecnología bluetooth permite un distanciamiento aproximado de 10mts sin perder señal.
Con esto concluyo mis cuatro motivos, personales, de porqué colgué los auriculares con cables y me moví a la nueva tendencia.
Me gustaría escuchar los tuyos y, sobretodo, escuchar porque preferís el cable al uso inalámbrico.
Este motivo va de yapa: luces mejor. Un cable colgando por enfrente tuyo en una video conferencia o en la calle no se ve lindo! :)