Las amistades representan una gran influencia para los niños y jóvenes, sobre todo cuando aún se encuentran construyendo su personalidad. Por eso es muy importante supervisar y estar al tanto de las amistades de tus hijos.
Es posible que el amigo de tu hijo no suela tener un buen comportamiento y quizá replica a su madre, insulta a los demás niños e incluso pega cuando algo no le parece bien. Quizá ese niño no tenga muchos límites en casa, o esté pasando por momentos complicados e incluso puede que tenga algún problema emocional sin resolver, pero aunque te dé lástima, tienes que pensar en el desarrollo de tu hijo ahora mismo, no puedes cambiar lo que se hace en casa ajena.
La influencia de los amigos es muy poderosa a lo largo de toda nuestra vida, pero cuando somos adultos somos capaces de decidir qué es mejor y qué no lo es para nosotros, pero los niños, dentro de su inocencia si no se les guía no podrán saber si realmente ese amigo es buena o mala compañía.
Es necesario que los padres guíen a los niños desde que son pequeños porque podrían haber efectos negativos hasta en la edad adulta en caso de no hacer nada. Un niño influenciable puede convertirse en un adulto joven influenciable. Para los niños y los adolescentes que aprenden a tratar las influencias negativas pueden tener un lado positivo.
Los niños son sociales por naturaleza
Los niños son altamente sociales y es normal que hagan amigos tan pronto como son capaces de interactuar con otros niños. Esto se vuelve aún más importante cuando llegan a la adolescencia, pero también pueden ser edades peligrosas porque si no han recibido la guía necesaria pueden ser muy influenciables.
Hay amigos y compañeros que pueden ser una influencia muy poderosa en su vida, ésta puede ser positiva o negativa. Pero si crees que el amigo o amiga de tu hijo/a es una mala influencia, entonces tendrás que tomar medidas en cuanto lo pienses para evitar problemas en el futuro.
No hables mal de su amigo
Si hablas mal del amigo de tu hijo puede ser algo contraproducente (a cualquier edad) porque puede crear sentimientos de controversia en tu hijo y además, estarás dando un mal ejemplo criticando y juzgando a otras personas. No critiques a otro niño nunca, porque entonces estarás obligando a que tu hijo escoja entre uno y otro.
El truco está en darle a tu hijo la forma más fácil de salir de esa amistad. Por ejemplo, en caso de que sea tu hijo un pre adolescente o adolescente, le puedes decir cosas como: “Sé que tu amigo está haciendo cosas que puede que te meta en problemas a ti, yo sé que tú no quieres que eso suceda. Si necesitas ponme como excusa si necesitas salir de una situación difícil, yo estaré a tu lado”.
Habla con tu hijo/a
Es necesario que teniendo en cuenta el punto anterior, hables con tu hijo/a y señales el comportamiento inadecuado de su amigo y explícale por qué ese comportamiento es inaceptable. También es necesario que sepa que estás preocupado por la presión del grupo y que confías en que no haga comportamientos inadecuados, tiene que ver que confías en su toma de decisiones acertadas.
El objetivo es acabar con el comportamiento negativo sin atacar al amigo, ayúdale a entender que es una mala influencia y que debe separarse para que las malas consecuencias no le perjudiquen a él también.
Crea un vínculo de confianza
Deberás construir una buena confianza con tu hijo/a, es necesario que sepa que te sientes orgulloso de él/ella siempre que toma buenas decisiones, y que confías en su buen juicio, así tendrá más conciencia y no querrá decepcionarte.
Para poder tener una buena confianza también deberás ser un padre o una madre involucrado/a, tendrás que estar a su lado, acompañarle a la escuela, asistir a los eventos, acompañarle a las actividades extraescolares, hacer cosas con tus hijos, pasa tiempo de calidad para que sea agradable e importante para los dos, así podrás construir una estrecha relación.
Supervisa a tu hijo/a
Además, será necesario que para mantener esa confianza tu hijo/a adolescente te diga con quién sale y dónde, si notas que intenta ocultar algo es porque sabe que no está bien. Si descubres que tu hijo menor de edad sale con personas que fuman, beben alcohol, consumen drogas o realizar actividades indeseables o ilegales, será necesario tomar medidas más drásticas y prohibir la interacción con ellos.
No retrocedas y vigila de cerca a tu hijo/a, ese tipo de compañías sólo pueden causarles serios problemas y será necesario que lo entienda, sin malos modos, ni gritos ni amenazas.
Fuente: www.etapainfantil.com
