os colapsos éticos, frente a los engaños humanos y mundanos, son promovidos por aviesos sabuesos de los descuidos ajenos, siendo al mismo tiempo las puertas de ingreso hacia sociedades sin modelos ni modales, vinimos con ellos siendo aliados pasivos de personajes vestidos de generales dirigiendo soldados empeñados en empuñar las armas que desarman los ánimos morales de comunidades e individuos despistados ante las numerosas señales que marcan las vías que siempre han existido, para seguir avanzando comunitariamente en la búsqueda por lograr la inalcanzable convivencia requerida, y que después nos sirva para estructurar un mundo ideal, ¿acaso tendremos tiempo suficiente para variar los estilos de vida asumidos, antes que se concrete la base de un ejemplo estructural que se presenta en las instancias anteriores a una masiva demolición? la respuesta a esta pregunta es algo netamente personal, en la medida que se pueda razonar.