EL PROBLEMA NO SON LOS HOMBRES, EL PROBLEMA ES EL MODELO
Si algún grito de guerra sintoniza hoy las inquietudes populares, es: “que se vayan todos”, y la verdad es que nos preguntamos, ¿qué representan muchos de los actuales congresistas?, y de igual forma ¿qué representan los partidos políticos y a quienes?, ¿es posible echarle la culpa a nuestros actuales congresistas, siendo que nosotros mismos los elegimos para representarnos?, el problema realmente no son ni los congresistas ni los partidos en sí, el problema es el modelo de estado que tenemos, tan grande e incontrolable que solo resulta un apetitoso botín en donde el lumpen político pretende sacar ventaja absolutamente de todo.
Mientras que no entendamos que el rol del estado solo debe sujetarse a: 1. La seguridad nacional y la paz social, 2. La implementación de la estructura básica y elemental para que funcione el País, y 3. La administración de una verdadera y real justicia (poder judicial). Seguiremos en la misma situación, ya que el estado está diseñado para que sea administrado o bien por el populismo socialista o bien por el populismo mercantilista, o por último, por una combinación de estas.
Desde el enfoque actual, el socialismo y el mercantilismo procuran la captura del estado con el único fin de “administrar” los recursos de esta, convirtiéndose en los primeros asaltantes del mismo, y el primer robo del aparato del estado, es creando impuestos y tributos, en la justificación que cuanto más dinero capte el estado más obras se harán en beneficio del pueblo, hoy vemos, como el estado solo funciona para algunos, o bien, como intermediación para comisionar grandes sobornos, o para el clientelismo como siempre pernicioso de darle un manejo político a los programas sociales, la pregunta es ¿QUE SE VAYAN TODOS? Refiriéndose a congresistas y ministros, con esa lógica solo cambian los actores, a o debiera ser, que se vaya el modelo de estado. ¿Requerimos de tantos gobiernos regionales?, necesitamos tantos ministerios?, cosa inversa a los países desarrollados, aquí a mayor tecnología, requerimos de mayor burocracia, EL PROBLEMA NO SON LOS HOMBRES, EL PROBLEMA ES EL MODELO.
