16 junio 2020
No hay ningún mal que por bien no venga decía Ella. La enfermedad, la discapacidad, te enseña a valorar lo que tienes; a no desear ningún imposible; a despreciar la suferficialidad y a fijarte solo en el contenido.
“Lo efímero no es para ti, hijo, admira los valores, fíjate en lo intangible y no admires el envoltorio de los sentidos, solo sumérgete en ellos”.
Ella siempre supo que decir cuando nadie decía nada … y yo tuve la suerte de saberla escuchar … y entender, cuando no sé, ni nunca supe, si alguien lo hacía.
Fuente: etfreixes.blogspot.com