Son rápidos, prácticos y fáciles de usar. Los fabricantes incluso producen alimentos envasados específicamente para su uso. A lo que me refiero son, por supuesto, a los hornos de microondas, el electrodoméstico que todavía se utiliza regularmente como parte de la preparación de la comida y del recalentamiento en aproximadamente el 90% de los hogares estadounidenses.
Digo “todavía”, por que es inexplicable a causa de los peligros asociados con el uso de microondas que se han documentado desde hace bastante tiempo, peligros que voy a esbozar una vez más en este artículo. En última instancia, los argumentos siempre podrían ser menos extremos ,si se hace un uso con moderación, pero dada la naturaleza agitada de la mayor parte de nuestras vidas, y la comodidad, parece que su uso es mas acusado, debido a la rapidez que ofrece.
Las microondas alteran la estructura química de los alimentos
Los microondas calientan los alimentos haciendo que las moléculas de agua contenidas dentro, vibren a frecuencias muy altas, eventualmente convierten esas moléculas en vapor. Es esta reacción la que aumenta la temperatura de los alimentos. El tipo de microondas “calefacción” produce lo que se conoce como calentamiento dieléctrico, que rebota alrededor del dispositivo y es absorbido por los alimentos que usted pone en él.
La calefacción de su comida en general es conocida por privarla de al menos una parte de sus nutrientes, pero muchos creen que la opción de calentar la comida a través de un horno de microondas también somete a lo que se conoce como el “efecto de microondas.” Muchos todavía argumentan que el efecto de microondas es un mito, pero una serie de estudios han sugerido lo contrario. En particular, un estudio publicado por la Universidad Estatal de Pensilvania en 2001 declaró que el calentamiento convencional y el calentamiento por microondas parecen del mismo en el nivel macro, pero son muy diferentes a nivel molecular. El estudio también hace referencia a un estudio de 1995 en el que un científico demostró con éxito que las microondas – a diferencia de otros dispositivos de calefacción -. Son capaces de destruir el ADN viral.
Otro estudio realizado en 2003 examinó el brócoli preparado en el microondas y se encontró que la verdura había perdido el 97% de su contenido de antioxidantes valiosos a través del proceso de cocción. Teniendo en cuenta que vivimos en un mundo dominado por los alimentos procesados, y gran parte de los productos frescos que comemos se cultivan en suelos fuertemente empobrecidos de sus nutrientes de origen natural, la idea de perder aún más la nutrición parece casi como un golpe definitivo para nuestra salud. Para la mayoría de nosotros, incluido yo mismo, comer totalmente crudo definitivamente no es demasiado atractivo, por lo que optar por el mejor método de cocción, hace que una posible duda sí parece importante.
El mejor método de cocción es posible también que se extienda a el aceite que usted elija para preparar su comida, ya que muchos aceites se vuelven rancios cuando se calientan más allá de cierto punto.
Contenedor de Químicos y Alimentos Grasos
Todos estamos familiarizados con la etiqueta “seguro para microondas” que se encuentra en una serie de envases de alimentos, pero esta etiqueta es totalmente engañosa. A pesar de lo que muchos piensan, sólo se refiere a la capacidad del contenedor para ser utilizado en un horno de microondas con seguridad sin fusión o iniciar un incendio. A lo que no se refiere es, a la seguridad en términos de los numerosos productos químicos tóxicos que puede filtrarse en los alimentos cuando se calienta – químicos que luego se ingieren.
Productos químicos tales como Tereftalato de polietileno (PET), benceno, tolueno, xileno, el ahora conocido BPA, e incluso se llama con otras alternativas más seguras BPS . Muchas de estas sustancias se han relacionado con el deterioro de elementos reproductivos femeninos y el desarrollo del cerebro, junto con la diabetes, enfermedad de la próstata, y más. El microondas de alimentos grasos en recipientes de plástico “seguro para microondas” también se ha encontrado para dar lugar a la liberación de las dioxinas carcinógenos conocidos.
El Vidrio para Horno es seguro y ampliamente reconocido como una de las mejores alternativas a la hora de calentar su comida, y aunque la cristalería a menudo puede ser más cara que muchos de sus homólogos, parece ser una buena inversión.
Incluso un nuevo y recién inspeccionado microondas puede tener fuga de radiación
Los fabricantes de microondas se merecen mucho crédito por las normas de seguridad aumentadas que han puesto en práctica en el desarrollo de los nuevos hornos de microondas. Gracias a su arduo trabajo, una serie de preocupaciones anteriores han sido rectificadas, sin embargo todavía parece haber una cierta exposición, sobre todo en un radio determinado del aparato cuando está en uso.
Incluso una marca nueva, en perfecto funcionamiento y con bloqueo nos puede exponer a un máximo de 400 miliGauss de radiación no deseada. Para poner esto en perspectiva, a tan sólo 4 miliGauss se ha relacionado con casos de leucemia. Esta recomendación es clara y sin duda recomendable para todos, pero es particularmente importante para las mujeres embarazadas y los niños. Dado que los microondas se utilizan más a menudo en medio del proceso de cocción, evitar el contacto con ellos a menudo puede ser muy difícil, ejemplificando aún más por qué deben evitarse por completo si es posible.
Cómo seguir adelante sin un microondas
Hay ciertamente muchas alternativas a la hora de calentar la comida. La única diferencia clave entre las microondas y las otras opciones disponibles, sin embargo, es el tiempo. Al igual que con muchos otros cambios dignos que nos sentimos inspirados para hacer en nuestras vidas, tomar un nivel de compromiso con el fin de implementar correctamente el uso se otros sistemas mas sanos.
Un paso simple, como la planificación anticipada puede recorrer un largo camino para evitar la necesidad de un microondas. Tomando ingredientes congelados del congelador con suficiente antelación a la comida, el tiempo de preparación les dará la oportunidad de descongelar de forma natural a tiempo para cuando necesitan ser cocinados.
Creo que cuanto más nos hacemos conscientes de las comidas que preparamos, más probable es que hacerlo de forma natural, lejos de la necesidad de una opción de preparación rápida. Tanto un horno tostador, como un horno convencional puede tomar mucho más tiempo para preparar una comida, pero los problemas de salud que se evitan con éxito, sin duda valen la pena.
Fuente: medicinasnaturales.net
