En los medios de comunicación en general (prensa, publicidad, internet...) y en la televisión actual, quienes desean ganar dinero, muestran lo que el espectador consume.
En muchos casos, y en el caso particular de Showmatch se trata de la exposición de la mujer en diversas situaciones con un denominador común: la falta de ropa y los bailes con contenido explícitamente sexual. Quizás, para algunas personas representa un buen espectáculo, pero para el público en general y para el femenino en particular, pareciera ser un objetivo a cumplir y un modelo aceptable, derivado probablemente de la costumbre y aquí es quizás donde surge la problemática: la imagen distorsionada con la que alimentamos nuestro cerebro todos los días.
Este modelo a seguir, lo único que hace es estereotipar a la mujer como objeto sexual, tapando lo que realmente son y pueden hacer. Nuestro trabajo se basa en tratar de ver los problemas producidos por esta denigrante imagen femenina y buscar una solución para encontrarle a la mujer el lugar que verdaderamente debería ocupar en la televisión y en cualquier entorno laboral.
La televisión ha cambiado muchísimo en los últimos tiempos. Antes, las figuras que lograban tener un alto nivel de popularidad, era gracias a un esfuerzo personal, años de arduo trabajo, inclusive mayor que en la actualidad, ya que antes el machismo estaba mucho más instalado. Hoy, aunque algo más matizado asistimos a otra clase de machismo no menos denunciable.
Hoy las nuevas figuras, muchas veces resultan fugaces y similares a las ya existentes. En su mayoría logran fama a través del escándalo contra otro famoso, otras, por su figura. Estas características, simplemente logran que su paso por la televisión sea efímero y poco importante. Hay una renovación constante de "famosas", por lo cual no quedan en la memoria del público, a diferencia de las grandes estrellas que siguen estando a pesar de su vejez. Podría decirse que gana la que hace mas escándalo y la que mas ropa se saca, todo concluye en que va a ser la persona de la que más se hable esa semana, sumado a que de lo que más se habla, es de los programas de Tinelli.
Otra de las cosas a tener en cuenta, es que también el público ha cambiado. Hoy en día, pareciera que a la gente no le interesa consumir lo mismo que en otras décadas, lo que incluso marca un punto fuerte sobre quiénes serán las figuras que resistirán en los medios y quiénes serán eliminadas por la aparición de otras.
De hecho, la imagen que se muestra de la mujer hoy es la que el público consume, estemos todos o no de acuerdo. Muchas veces escuchamos a gente criticar fuertemente a un programa de televisión, tiempo después nos enteramos que se sienta todas las noches a verlo. Entonces, ¿quién tiene la culpa? ¿Consumidores o programadores? Habría que plantearse qué grado de responsabilidad tenemos como público con respecto a lo que nos dan a consumir los medios de comunicación.
-La realidad es que sin gente que consuma la programación, dejaría de existir el producto.-
Podemos observar detenidamente a la mujer en los programas de Tinelli, por ejemplo, Bailando por un sueño: cómo es mostrada, los roles que cumple dentro de ella, qué lugares ocupa, cuáles no, enfocándonos en la diferencia que hay con el sexo masculino. La desigualdad entre hombres y mujeres en la televisión, es uno de los primeros factores.
La mujer se mostró "sexy" desde la primera imagen de la televisión en 1951. Canal 7 fue quien lo transmitió. Se repitió en shows como Tropicana Club o los sketchs de los programas de Sofovich. Sin embargo, hoy en día se transmite una imagen mucho más sexual de la mujer. Las mismísimas participantes de "Bailando por un sueño" son las que aceptan que se las vea de tal manera. Es por tanto imposible para la sociedad contemplarlas de otra manera que no sea como objeto sexual. ¿Esto afecta a la percepción que tiene el público sobre el resto de mujeres? Esto es algo sobre lo que deberíamos de reflexionar.
Mostrar una mirada estereotipada, sexista y denigrante de la mujer es considerado violencia mediática. Existen dos grandes leyes aprobadas recientemente que definen y sancionan la violencia hacia la mujer en los medios de comunicación. La primera es la ley 26.485 de protección integral para prevenir, sancionar y erradicar la violencia contra las mujeres. Según esta norma, la violencia mediática es una forma de manifestación de la violencia simbólica y la define como "aquella publicación o difusión de mensajes e imágenes estereotipadas a través de cualquier medio de comunicación, que de manera directa o indirecta promueva la explotación de mujeres o sus imágenes, injurie, difame o discrimine, deshonre, humille o atente contra la dignidad de las mujeres". A partir de ahí se podrá respaldar legítimamente lo que se plantea en la hipótesis.
¿Qué consecuencias puede traer este tipo de programas para una sociedad? La televisión como medio principal de comunicación de nuestra sociedad es un espejo en el que nos miramos todos. En este tipo de programas la mujer no es valorada por sus dotes artísticas, sino principalmente en función de sus atributos físicos que, por supuesto, responden al estereotipo dominante de subordinación y discriminación. Esto es que los programas de televisión como "Showmatch" promueven un solo estereotipo de mujer: flacas con un cuerpo perfecto y sexys, pero con "poco cerebro". Por lo tanto, ¿Nos quieren "vender" ese tipo de mujer? ¿Cómo puede ser que una mujer del bailando por un sueño por operarse e ir prácticamente desnuda se gane más respeto, legitimidad y mejor salario que otra que se dedica a estudiar una carrera universitaria? ¿Cómo puede ser que en una sociedad con un elevado nivel cultural desde hace muchos años, se dilapide de una manera tan radical los resquicios de la importancia que tiene el trabajo diario para formarse un buen futuro? ¿ y cómo se permite con unas clases sociales tan diferenciadas que este tipo de actuaciones se vislumbre para mucha gente como el único medio de salir de una situación complicada económicamente?
-Nos interesa transmitir que la televisión promueve el maltrato de la mujer como un estereotipo sin necesidad de alcanzar.-
Además, generan en la sociedad femenina cierta influencia. Muchas chicas adolescentes pueden tomar como modelo a las participantes del Bailando por un sueño y conllevar ciertos problemas con respecto a los trastornos alimenticios. Todo ello sin necesidad alguna porque no es el tipo de mujer que debemos promover para una igualdad entre sexos. ¿O es el destino que queremos para esas jóvenes?. Pero quizás lo más grave de todo sea el ejemplo que le damos a las generaciones venideras que ven, los contenidos que se presentan en el programa, como un ejemplo imitado y a seguir por sus mayores de trato y exposición de la mujer.
¿Vende más el erotismo y la sexualidad femenina? Es por último la pregunta que nos queremos responder. Por nuestra parte, creemos claramente que sí, que los espectadores están mas interesados en ver a una mujer desnuda que en ver programas educativos, o de entretenimiento de otro tipo, no solo es lo que nosotros creemos, el rating semanal lo demuestra con sus altos porcentajes inclinados a este programa. Es por lo tanto de vital importancia que como sociedad reflexionemos sobre el espectáculo dantesco al que estamos asistiendo y al que estamos dando cabida. Qué consecuencias tiene esto sobre nuestra manera de ver a otro ser humano y los valores que estamos transmitiendo a las nuevas generaciones. Además nos interesa concientizar a todos aquellos que no hayan notado el lugar que ocupan estas mujeres en particular, y tantas otras en otro tipo de programas.
Creemos que profundizar este tema será útil para que los espectadores tomen conciencia sobre la forma errónea en que está creada la imagen de la mujer en este tipo de programas. En cómo el erotismo está expuesto en los programas de televisión y en espacios públicos y de qué manera se transmite.
Fuente sacada de:
http://www.monografias.com/trabajos89/estereotipo-mujer-showmatch-television-argentina/estereotipo-mujer-showmatch-television-argentina.shtml
Escrita por Araceli Larrosa.
Reescrita por Alba Camuñas Rosa.
