El caudillo ha muerto; no ha quedado ni su sombra.
Por ninguno de ellos, son caudillos; el caudillo ha muerto; del caudillo no ha quedado ni su sombra. México necesita un gobierno de caolición repúblicana, donde la división de poderes sean un hecho; las mayorías simples están muertas. Sólo con un programa de gobierno moderno, democrático y con profunda convicción de justicia social para desmantelar la pobreza en nuestro país México saldrá adelante y se evitará la balcanización que ya se ve venir, que nos desaparecerá como nación. Ninguno de los tres partidos tiene mayoría, quien así lo crea se hundirá, junto con ellos el país saqueado por las empresas extranjeras extractivas del subsuelo y sus riquezas y los financieros y banqueros de judíos de Wall Street. Dejen de impulsar caudillos femeninos o masculinos, el todo poderoso a muerto. La gran amenaza de México es Donald Trump y los fascistas del ku kux klan junto con su nacionalismo de Cherrios y Cambell soup. Porque los chivos expiatorios del fracaso del capitalismo judaico norteamericano somos los mexicanos y todos los latinoamericanos que van allá tras la búsqueda del American Dream. Lo que viene es la guerra contra el último ejemplar de super macho rubio del destino manifiesto, Donald Trump. Por algo los del PRI antes de cortarse el dedo se lo amarraron, trayendo al hombre rubio que más nos insultó y vilipendio en menos de medio año, Donald Trump. Por lo mismo sacaron del ataúd político a Luis Videgaray y Caso, llevando a este Fouche tricolor al BANCO DE MÉXICO, pues sabedores de que van a perder el poder político se preparan para retener el poder económico. Por eso de entrada el PRI y su pinche chino están descartados, los mismo que La Calderona pues es cómplice de más de 180 mil muertos y muertas del calderonismo y su narco guerra que aún no acaba. Si el PAN o Morena quieren políticamente hacer algo, tendrán que ir en un frente amplio patriótic, democrático, moderno y nacionalista. Donde el candidato aún estará por decidirse. No por mucho madrugar amanece más temprano; ni tampoco las mil y unas noches del diario Reforma nos van a convencer que la elección ya la tiene ganada Morena y su super candidato, porque al final todo termina en un gigantesco plantón sobre Reforma. Algo así como la serpiente mordiendo su propia cola.El gran derrotado no sera AMLO o Morena, sino los 100 millones de pobres resultado de casi seis sexenios de neoliberalismo y absurda globalización saqueadora. Además el gran enemigo interno de México es el asqueroso y dictatorial presidencialismo, que sumado a la visión estatista de que cuando ganemos el gobierno podremos resolver todo, eso esta por verse. Porque sino sumamos a los organizaciones sociales y ciudadanas a esta contienda, el asunto esta resuelto, el PRI con su aliados del PVEM, PAS y PANAL tienen resuelta la elección y a su favor porque también por una tarjeta Monex o una despensa se vota. Sino ahí están los resultados del pasado proceso electoral presidencial, donde el pillo Peña Nieto salió triunfador. Además las pasadas elecciones federales y algunas estatales y hasta municipales, pese al triunfalismo de Morena, no ganó ningún estado o municipio grande, porque como les sucedió en Cancún, los candidatos por ser priistas siempre renunciaron. y como dijera la nana, esa es otra historia. Vamos en coalición o nos lleva la chingada.