Cada tanto aparecen nuevas tecnologías que nos sorprenden, no solamente por su innovación sino por la capacidad que tiene para ver un futuro más ecológico, donde las interacciones del humano no afecten tanto al medio ambiente que nos rodean y donde, la huella que dejemos sea una mucho más responsables. Ahora bien, una gran fuente de contaminación y desperdicio de agua, como todos sabemos, son los inodoros. Aunque han aparecido nuevos modelos que utilizan mucho menos líquido, y aunque son avances importante aún se trabaja para mejorar.
Un avance importan en este sentido son los baños secos. Aunque todos asociemos la imagen del inodoro con el agua, porque así se nos ha mostrados desde la infancia, la verdad es que existen muchos modelos que no utilizan ni una gota de este líquido, por lo tanto se les considera baños secos ecológicos. En el siguiente texto te diremos qué son, cómo funcionan y las ventajas que da utilizarlos.
QUÉ SON LOS BAÑOS SECOS
Al hablar de baños secos ecológicos nos referimos a todo aquel en los que no necesitamos ni una gota de agua para desarrollar todo el proceso. Esto hace que el ahorro de dicho elemento sea mucho mayor y que se utilice para lo estrictamente necesario. Este tipo de sanitarios no se encuentran sujetos ni conectados al bajante de la casa, por lo que no llegarán a las redes de agua residuales. Lo anterior hace que sean muy sencillos trasladar a los lugares que queramos.
Tantos las casas convencionales como las habitaciones de invitados o los cobertizos puede hacer uso de este tipo de baños. Además, una vez los residuos se haya acumulado, se pueden utilizar para el abono en cultivos de frutas, hortalizas o cualquier tipo de planta; por esa razón se les denomina ecológicos.
FUNCIONAMIENTO
El cómo funcionan es muy sencillo, al igual que su instalación. Un baño ecológico se basa en dos grandes cámaras situadas debajo del lugar en el que colocaremos el inodoro. Estas cámaras se encuentran totalmente secas, por esta razón ahorrarán agua y no producirá contaminantes. Del mismo modo se encontrarán impermeabilizadas, herméticas en su totalidad con el fin de evitar fugas de cualquier tipo.
La primera cámara que se ubica debajo del inodoro tardará unos seis meses en llenarse por completo con un uso convencional. Cuando aquello haya ocurrido, pasaremos a utilizar la segunda, que se llenará en el mismo tiempo. Mientras esto ocurre, los residuos de la primera se asentarán y poco a poco se convertirán en compost para ser utilizado como abono. Al llenarse cada cámara, se deben vaciar y el proceso volverá a comenzar.
VENTAJAS
Uno de los grandes beneficios, no solamente para ti sino también para el planeta, es la poca utilización de agua y los beneficios que esto traerá para el ambiente. Es verdad que utilizaremos agua en otros momentos, como a la hora de ducharse o en los lavamanos pero te aseguramos que al no utilizarla en el inodoro te ahorrarás mucho dinero.
Además, la instalación de este tipo de dispositivos es muy sencilla y se puede hacer en cualquier clase de vivienda, tenga o no inodoro convencional. Te recomendamos que si quieres hacerlo lo hagas acompañado de un fontanero que te ayude en todo lo referente a las instalaciones, esto con el fin de que no haya ninguna clase de fuga o inundaciones.
Fuente: cronicaglobal.elespanol.com