La cohabitación antes del matrimonio aumenta el riesgo de ruptura

 
Related

"Los pequeños con discapacidad no deberían nacer, solo son un estorbo" indico funcionaria de México

El Hombre Social
1868 points

¿Qué tienen los pobres en la cabeza?

El Hombre Social
1078 points



Most recent

GRITOS DE GUERRA

Octavio Cruz Gonzalez
8 points

Si sufres depresión o crees que alguno d los tuyos la sufre, ya es aplicable una APP que lo descubre

NOTICIAS-ETF
12 points

Pueden estar relacionados calidad del esperma y la consumición de alimentos ultraprocesados

NOTICIAS-ETF
8 points

Migrañas: A la venta Vydura, el primer medicamento que trata y previene las crisis

NOTICIAS-ETF
12 points

La mejor edad es la que tenemos ahora

El diario de Enrique
10 points

MODELOS SOFOCANTES

Octavio Cruz Gonzalez
6 points

Especial, un día especial

El diario de Enrique
8 points

Kingston FURY, marca oficial de SSD en el Campeonato Six Invitacional

Prensa
12 points

Pure Storage acelera la adopción de la IA empresarial para satisfacer las crecientes demandas con la

Patricia Amaya Comunicaciones
14 points

Buscar donde se esconde la belleza ... un gran reto

El diario de Enrique
10 points
SHARE
TWEET
A menudo se dice que la cohabitación permite a los futuros marido y mujer conocerse mejor y evitar así las uniones desafortunadas. Sin embargo, el Centro Nacional de Estadísticas Sanitarias de Estados Unidos revela una realidad distinta: las parejas que cohabitan antes del matrimonio son más frágiles.

La cohabitación antes del matrimonio aumenta el riesgo de ruptura

Las parejas que viven juntas antes de casarse tienen, de media, una probabilidad 6 veces mayor de romperse antes de que lleguen a los 10 años de convivencia. En cambio, las expectativas de duración de la pareja mejoran si empezaron a convivir cuando ya estaban casados.

El estudio refleja también el aumento espectacular de la cohabitación en Estados Unidos. A partir de una muestra de 12.571 mujeres y hombres de 15 a 44 años, los autores señalan que el porcentaje de mujeres que rozan la cuarentena y han cohabitado se ha duplicado en 15 años hasta llegar al 61%.

Otro dato interesante es que la mitad de las parejas que empiezan cohabitando se casan a los tres años. Si los dos miembros de la pareja tienen estudios superiores, es probable que se casen antes y que su matrimonio dure por lo menos 10 años.

Para Nelly A. Musick, profesora de análisis social en la Universidad de Cornell, los resultados del estudio sugieren que hay una brecha abierta entre ricos y pobres respecto a la concepción del matrimonio. “Mientras la cohabitación sigue siendo un camino hacia el matrimonio entre las clases altas, parece que las mujeres de bajo nivel de renta tienden a ver la cohabitación cada vez más como un punto de llegada”, explica Musick.

Las actitudes sociales hacia la cohabitación también difieren en función del sexo. Entre los encuestados, el 62% de las mujeres de 25 a 44 años estaban casadas y sólo el 8% cohabitaban. En cambio, el porcentaje de hombres casados desciende hasta el 59% y el de la cohabitación sube al 10%.

Un último hallazgo significativo del estudio es que las mujeres que a la edad de 14 años no vivían con sus padres biológicos o adoptivos son menos proclives a casarse que aquellas que crecieron con su padre y su madre.

Menor compromiso

La publicación de estas estadísticas confirman las conclusiones de otros estudios que en su día fueron bastante polémicos. Investigaciones realizadas hace más de una década revelaban no solo que las parejas de hecho se rompen más que los matrimonios, sino que también aquellos que se casan después de haber cohabitado son más proclives a divorciarse que quienes fueron directamente al altar.

En un estudio publicado en 1999, dos conocidos sociólogos estadounidenses, David Popenoe y Barbara Dafoe Whitehead, del National Marriage Project de la Universidad Rutgers, afirmaban que “una atenta revisión de los datos que proporcionan las ciencias sociales sugiere que vivir juntos no es una buena manera de prepararse al matrimonio ni de evitar el divorcio”.

Según los autores, las personas que han vivido antes con otras parejas muestran un compromiso menos firme. “Toleran menos la insatisfacción y dejarán romperse un matrimonio que podría haberse salvado”, dicen Popenoe y Whitehead (“Should We Live Together? What Young Adults Need to Know about Cohabitation before Marriage”: cfr. Aceprensa, 22-09-1999).

Fuente: www.aceprensa.com
SHARE
TWEET
To comment you must log in with your account or sign up!
Featured content