El pasado 16 de marzo se dio un acto histórico musicalmente hablando: Vicky Larraz y su banda Olé-Olé (con el batería de Münik) se subían a los escenarios en riguroso directo, era la tercera vez que lo hacían desde que se publicara el recopilatorio "Sin control" un disco pelín despropósito que nos hizo redescubrir algunos temazos de la banda en sus tres etapas cantados por Vicky y con el apoyo de algunos cantantes con mejor o peor resultado. Tuvimos ocasión de verles en un acústico en el Museo ABC con aires de orquesta de pueblo pero buenas intenciones, demostrando que están aquí para quedarse y volvieron a darlo todo en Badajoz con una puesta en escena inexistente dando de nuevo esa imagen de orquesta verbenera, aún así se dejaba entrever que no eran unos cutres si no que igual no eran los lugares adecuados para ver por primera vez en 27 años a Larraz regresando con su banda, así que corramos un tupido velo y centrémonos en el concierto en la sala Joy Eslava donde se congregaron bastante más seguidores de la banda y la cantante de lo que cabría esperar teniendo en cuenta los 27,50€ de la entrada y la no aparición del disco en las listas de ventas de Promusicae, canales musicales ni radios. Comenzó a las 21:00h puntualmente presentados por Yurena (corramos otro tupido velo que ya llegamos a lo bueno, tranquilos) con una pequeña intro que nos dejó ver a los integrantes de "la nueva banda" dar paso a la cantante que nunca debió salir de sus filas, Vicky Larraz hacía acto de presencia junto a los primeros acordes de "Lili Marleen" y la Joy se vino arriba con vítores y aplausos de emoción. Vicky entró con su vozarrón y el estilismo característico de su etapa en solitario donde un collar sacado de Dinastía, una torera de diseño, un corsé, guantes, bisutería y falda del Rastro le daban empaque punk para defender su regreso y que nadie se olvidara que en su día fue una adelantada a su tiempo, si bien es cierto que ese estilo puede convertirla en una caricatura de sí misma como se descuide. La nostalgia se apoderó de la sala y uno se preguntaba por qué han tardado tanto en regresar, por qué Larraz no se ha prodigado en conciertos en directo viendo lo bien que se le da un directo... a ratos. "Caminemos" fue el segundo tema, sonaba oscuro y con un aire trip-hop digno de unos Portishead "abolerados", Vicky en la primera parte nos dejó con la boca abierta con una potencia de voz solo vista últimamente en su versión de "La fiesta terminó" de Paloma San Basilio para en la segunda parte de la canción amedrentarse al no llegar a los tonos altos que la canción exige. El siguiente tema: "Con solo una mirada" preciosa canción con el protagonismo del saxo (que no llevan en su directo) y una invitada que conocen solo ellos (si acaso) y que no pega ni con cola con el estilo ni la canción, la cantante de un grupo llamado Materia Prima primos pijos de Siempre Así, anodina y sin carisma nos ayudó a desear que empezara el siguiente tema "No controles" que nos llevó directos a ese 1983 aunque con un sonido más rockero, parecía que teníamos todos 15 años dando botes de alegría con el himno "Naif" de la anarquía pop, siguió "Me vengaré" tema poco conocido de la etapa Sánchez que debe ser que les gusta a ellos o algo, "Soldados del amor" volvió loco al público y empezó a preocuparnos menos cómo cantaba Vicky y nos dejamos llevar con su manejo del escenario, su magia, su carisma intacto a lo largo de estos años, "Nadie como yo" trallazo rock editado en el álbum "Llévatelo todo" que nos dejó a todos sin aliento demostrándonos que pueden hacer nuevos temas realmente potentes (la versión en inglés es aún mejor si cabe), a estas alturas no sabía si estaba viendo a Cher, Luz o Tina Turner, Vicky Larraz en concierto es una mezcla de las tres pero con su peculiar estilo, "No mueras posibilidad" y el estilo Motown se apoderaban ahora de la Joy, un vestido largo hubiese venido bien para este tema tan Amy Winehouse que, honestamente le queda mejor a Sonia Santana, "Conspiración" nos trajo de vuelta a los 80 con un toque rock bastante distinto a la versión tecnificada del álbum, de aquí pasamos a una presentación de la banda con un fondo musical funk demostrándonos que tocan todos los palos y todos los controlan a la perfección, Gustavo tiene tal manejo de la guitarra que parecía John Lee Hooker o un Tom Petty and the Heartbreakers en estado de gracia, se le ve agradecido e ilusionado con cada acorde que toca y con el público que le escuchaba entregado a sus solos, debido a esto (supongo) decidió tocar el mágico tema "Por ser tú" dedicado a Juan Tarodo, momento emotivo y un tanto extraño que pareció pillar de sorpresa a Larraz que no se sabía la canción que ella misma había compuesto así que corrimos otro velo y apareció el cantante de Modestia Aparte que apareció vestido como si estuviera tomando cañas después del partido de padel, soso hasta decir basta cantó el brillante "Bailando sin salir de casa" digno tema de haber sido cantado junto a alguien acorde al estilo, una Alaska por ejemplo pero que nos lo tragamos con la voz de este hombre y sus movimientos arritmicos, se nota que este tema iba para Vicky antes de irse de la banda porque le va como anillo al dedo, funk y disco perfectamente interpretado, "Dame", "Yo soy infiel" y "Voy a mil" sonaron tan jodidamente cañeros que parecía un concierto de Pat Benatar o Blondie, la aportación de Nika fue anecdótica haciéndonos ver que algunos duetos no suman si no restan, suerte que sacaron el álbum "En control" sin los duetos a excepción del "Búscala" que casualmente es el tema con el que terminaron el concierto (quitando los bises) y que sabiendo que iba a ser así deberían haberlo ensayado a la perfección para que no sucediera el bochornoso momento de ver a Vicky Larraz inventándose casi toda la canción y cantándola realmente mal, lástima porque es de las canciones más hermosas de la banda. Se agradece que no cantaran el "Sola", se echó en falta "Adrenalina" y "Volaba yo", también temas en solitario de Vicky como "Rompamos el hielo" o "Llévatelo todo", más que nada por darle al concierto una duración más extensa, apenas hora y cuarto sin la repetición de dos temas al final.
Conclusión: Les falta rodaje, a Larraz un profesor de canto y más seguridad porque voz y talento tiene pero la falta de rodaje le ha hecho mella, aún así fue un derroche de buen hacer y profesionalidad, un ejercicio de nostalgia, y sobre todo el comienzo de algo grande aunque para ello sea necesario salir de la promo en medios tirando a la derecha recalcitrante, sacar singles y hacer vídeos, aparecer en festivales populares ocupando el lugar de una banda de pop-rock que va a dejar de piedra a más de uno que se deje los prejuicios en casa.
