*Por Carlos Eduardo Lagos Campos
Aquí te presento el artículo actualizado:
La decisión del presidente Gustavo Petro de permitir que exguerrilleros usen los servicios del hospital militar es una medida polémica y controvertida, especialmente considerando el contexto y los antecedentes de violencia entre los guerrilleros y las fuerzas militares.
La formación y valores de los miembros de las fuerzas militares se basan en principios como la lealtad, el honor, la disciplina y el sacrificio, con el objetivo de defender la patria y proteger la integridad del Estado. Estos valores se forjan a través de un riguroso entrenamiento y una estricta jerarquía, que busca inculcar una fuerte sentido de pertenencia y compromiso con la institución.
Por otro lado, la guerrilla se caracteriza por una ideología de carácter marxista-leninista, prochina, castrista, chavista, o influenciada por otros pensamientos foráneos, que busca cambiar el orden establecido a través de la lucha armada. Los miembros de la guerrilla suelen tener una visión crítica del Estado y de las fuerzas militares, a las que ven como opresoras y corruptas.
La principal diferencia entre ambos es que las fuerzas militares actúan dentro del marco constitucional y legal, mientras que la guerrilla opera al margen de la ley y utiliza la violencia como medio para lograr sus objetivos.
Permitir que exguerrilleros usen los servicios del hospital militar puede ser visto como una contradicción con los valores y principios de las fuerzas militares, y puede generar un sentimiento de injusticia y descontento entre los miembros de la institución.
El presidente Petro justifica esta medida como una forma de superar el "egoísmo social" y promover la reconciliación, pero es importante considerar las consecuencias y el impacto que esta decisión puede tener en la moral y la cohesión de las fuerzas militares.
Es necesario buscar alternativas que promuevan la reconciliación sin generar conflictos y divisiones dentro de la institución militar. La atención médica para todos es un objetivo loable, pero no debe lograrse a costa de la cohesión y la moral de las fuerzas militares.
*Abogado
Presidente del Centro de Pensamiento Libre Director del programa Sapiens.
