or medio de una interpuesta guerra jurídica, que pasa desapercibida para el común de los ciudadanos, aunque sientan sobre sus existencias los directos efectos de su infame reproducción, se ha logrado cooptar desde el exterior los aparatos judiciales de muchas naciones, las cuales se han vuelto en contra de sus propios habitantes, exigentes de equilibrio judicial en conjunto con justicia social.