09 noviembre 2023
- Me di un paseo y al final del recorrido, cuando llegué al destino, vi a mi querida amiga "Palmerete" en un estado lamentable. ¿Cómo se puede ser tan cruel?
- El responsable de la jardinería local seguro que duerme bien, mientras él lo hace mi amada Palmerete se muere sin que nadie haga nada por salvarla, quizás acaben mandándola a una residencia de palmeretes ancianas, tan de moda en la especie humana en la actualidad.
- Entré en el CdS y una vez sentado en mi sala de las torturas (de espera), vi un enorme montón de braguitas antihumedad esperando ser entregadas a quien las necesite.
- Una eficiente enfermera empezó a desmontar el montón para iniciar el traslado de dichas braguitas a lugar seguro y como yo soy muy curioso y en eso no cambiaré nunca, le pregunté: Para mí no tendrán, ¿verdad?
- La mujer me miró, muy seria, pero de golpe comenzó a reír como si de una orgía sexual muy poco seria se tratara y ahí se quedó, riendo, con una risa floja de esas que no se cortan, mientras, yo me fui a ver a mi galeno, que ya me reclamaba, para que me diera los resultados de los exámenes del pasado día 2.
- Todo bien, bueno, lo bien que se puede estar a mi edad y condición, hecho un chaval, respirando vida, resistencia al mal y un humor venenosamente contagiable, pues al salir, la enfermera, que aún se estaba riendo, me dijo: ¿Permite que le dé un abrazo? ... y se lo di, claro.
@etarragó
Fuente: etfreixes.blogspot.com