Hay algo que tiene en común la casa municipal de Portland, Oregón, que parece de mármol con, un restaurante que parece de bambú y el mismísimo palacio de Versalles, Francia, con representaciones de figuras humanas, amores y flores. ¿Qué es? El yeso, que es un mineral y varios tipos de rocas sedimentarias. Mediante deshidratación y algunos aditivos o químicos se puede alterar la dureza, el tiempo de fraguado y cual será su adherencia
Actualmente también se usa para materiales prefabricados, llamados de roca yeso, utilizado en la construcción para paredes interiores y cielorrasos.
Es muy usual el yeso cocido, que se vende en forma de polvo y que se le va a agregando agua para trabajarlo.
También se comercializa como alabastro, para tallado piezas de pequeñas dimensiones, vasijas etc.
Es uno de los materiales que tiene mayor antigüedad de uso, encontrándose restos de varios de miles de años atrás. En la Pirámide Giza, por ejemplo se usó el yeso para el sellado de juntas entre bloques. El yeso o enlucido dejó su marca en la página de la historia. Los hebreos y babilonios primitivos conocían el enlucido. Algunos dicen que los griegos fueron los primeros que llegaron a perfeccionarlo pues sus acabados eran tan espectaculares que los observadores podían ver sus propios reflejos en las paredes. Hasta usaban trozos de material enlucido como mesas y espejos.
Los musulmanes dejaron su impronta con el yeso en España, pudiéndose observar hasta el día de hoy, hermosos trabajos en Sevilla, Aragón, Granada y Toledo.
Para la edad media En Francia se lo uso como revestimiento y en la época del Renacimiento como elemento decorativo.
Tuvo aplicaciones tanto los períodos Barroco, como Rococó. Pero empezó a tener un uso más masivo recién en el siglo XVIII en Europa, principalmente para la construcción.
Cuando Mezclamos el yeso con agua el campo de utilidades es inmenso, pudiendo vaciarlo, hacer moldes, pintarlo, modificar su textura, fratasarlo, pulirlo o pasarle la llana. En cuanto a eso, cuando el yeso fraguó se lo puede esculpir como si fuera piedra. Y así se usó por muchísimo tiempo.
Y aunque parezca sencillo, trabajar este material, no lo es. A quien lo maneja bien normalmente se lo llama maestro yesero. Y bien aplicado, porque hay que saber manejar una variada colección de llanas, reglas, moldes y más herramientas.
Entre los italianos especialmente, el trabajar con yeso era más que simplemente trabajo. Era una herencia familiar, cuidadosamente transmitida.
Y aunque ya no se ve tanto, que lindo es encontrarse con edificios o estatuas que demuestran las cualidades de un material tan dúctil como lo es el yeso.
Fuente: bymsoftinternacional.blogspot.com