13 mayo 2023
- En el momento más culminante de la noche del viernes, el amigo instructor, realizador y encargado del ruido musical, me hizo una señal con la mano alzada señalando los altavoces, luego puso la mano con el dedo señalador hacia nosotros dos y luego fusionó los dedos de sus manos para acabar poniendo su derecha (la mano) en el corazón (el suyo) y la otra (mano) en su boca en señal de estar enviando un beso.
- Nos miramos los dos (Ella y yo) como solemos hacerlo en esas locas circunstancias que solemos compartir con los amigos y entendimos el mensaje ... ¡nos iba a poner una de las nuestras!
- Y la música sonó, no se oía ni una mosca, sólo la música ... nos levantamos y como si tuviéramos esos diecisiete años con que nos conocimos, empezamos a danzar sin movernos del mismo espacio, como anclados en el pavimento de esa preciosa y coqueta pista de baile ... al terminar, ellos (los silenciosos amigos) ... aplaudieron poniéndose en pie hasta ... emocionarnos, dos semanas de ausencia obligada a ese punto de encuentro tenían la culpa, fue una gran y emotiva sorpresa.
Si ella me faltara alguna vez nadie me podría acompañar
Nadie ocuparía ese lugar que descubro en cada amanecer
Si me faltara alguna vez
...
Fuente: etfreixes.blogspot.com