Para disfrutar el verano en estos tiempos tan difíciles donde prácticamente no podemos salir de casa, podemos instalar una piscina en el jardín siempre y cuando contemos con las condiciones adecuadas y el espacio adecuado para la seguridad y comodidad de todos.
Esto nos permitirá poder disfrutar de los días calurosos que se presentan durante el verano sin tener que salir de casa y poner en riesgo nuestra salud. Para realizar esto de la mejor manera posible debes tener en cuenta algunos consejos antes de instalar tu piscina en el jardín.
De eso se trata el artículo que voy a presentarte el día de hoy.
RECOMENDACIONES QUE DEBES TENER EN CUENTA PARA INSTALAR UNA PISCINA EN TU JARDÍN
Lo primero que debes hacer es tener en cuenta que existen dos tipos de piscinas.
Una de ellas son las piscinas de superficie, que son las más sencillas de instalar y de transportar. Estas son bastante económicas y no necesitan mano de obra calificada para su instalación. Puedes hacerlo tu mismo.
Estas han ido ganando mucho terreno desde hace algún tiempo. Lo más beneficioso de este tipo de piscinas es que las puedes montar y desmontar cuando tú lo decidas.
También podemos encontrar las piscinas enterradas que son las más elegidas pero también un poco más costosas. Estas requieren un montaje y una mano de obra calificada.
Las puedes fabricar en diversos materiales como son acero inoxidable, madera, hormigón o poliéster reforzado con fibra de vidrio. Ten en cuenta que estas piscinas no pueden guardarse durante el invierno, cómo puedes hacerlo con las piscinas superficiales que cuentan con una garantía de al menos 30 años.
El tiempo que tome instalar una piscina va a depender del tipo de piscina que vayas a escoger. Así que debes calcular este tiempo si quieres disfrutarla durante el próximo verano. El mejor sitio para instalar una piscina va a ser en un lugar donde el suelo sea liso y no presente desniveles.
Debe estar lejos de instalaciones o tomas de electricidad y no debe estar ubicada debajo de árboles para evitar que las hojas caigan dentro de ella y se ensucie.
Las piscinas portátiles pueden estar disponibles en diferentes formas como son octogonales, redondas, rectangulares, ovaladas. También están fabricadas en diferentes materiales como madera, metal, entre otros.
Si deseas colocar una piscina para que esté allí un largo periodo de tiempo, puedes colocar una piscina fija y además ten a la mano un cobertor para cuidar el agua del sucio que pueda caer de árboles y flores.
Las piscinas fabricadas en fibra de vidrio también son de fácil instalación. No tienen mucha flexibilidad, pero vienen en diseños bastante divertidos.
Planificar colocar una piscina de este tipo se puede realizar en poco tiempo, por si fuera poco no debes estar pendiente del mantenimiento, solamente debes estar atento de protegerla con una capa para evitar que el tiempo la dejaste.
Al querer instalar una piscina enterrada tienes que contar con personal calificado para efectuar este tipo de trabajos, porque estarías botando tu dinero a la basura.
Es recomendable que puedas elegir una empresa muy cerca del lugar donde piensas instalar la piscina y necesitas un permiso para poner en marcha la obra.
No te preocupes de que esto no es un trámite complicado. Solamente bastará con presentar el proyecto técnico al ayuntamiento de tu localidad. Allí, ellos verificarán que el terreno es apto para ejecutar este tipo de construcción y te otorgará lo necesario para que tú te encargues de fabricar tu piscina.
Es por eso que en algunas ocasiones es mucho más fácil colocar una piscina desmontable. Es mucho más económico y rápido de realizar.
Fuente: www.sevillaactualidad.com
