Hay momentos en los que es posible caer en difíciles situaciones financieras y que no se pueden resolver de forma oportuna los compromisos adquiridos, por lo que hay que tomar medidas extraordinarias para tratar de solventarlos de la mejor manera posible. Una de estas salidas es la Ley de Segunda Oportunidad, que es de gran ayuda para solucionar satisfactoriamente muchos de estos problemas.
Fuente: digitalsevilla.com