Se acerca el verano y quieres poder disfrutar del sol así como refrescarte en los días de mucho calor. Para esto, lo mejor es tener una piscina en casa que puedan utilizar tanto adultos como chicos, cuando así lo deseen.
Sin embargo, no todos cuentan con el presupuesto o el espacio necesario para colocar una piscina permanente, que además requiere hacer obras complejas. Por tanto, una excelente alternativa son las piscinas desmontables, las cuales se consiguen en distintos materiales.
Estas piscinas vienen en una gran diversidad de formas y tamaños, por lo que se adaptan a espacios que van desde una terraza hasta un jardín amplio. Asimismo, tienes la ventaja de poder desmontarlas cuando pasa el verano y así no hacer el mantenimiento de invierno.
LO QUE DEBES SABER ANTES DE INSTALAR UNA PISCINA DESMONTABLE
Una piscina desmontable es una excelente opción para gozar de un verano refrescante sin tener que salir de casa. Si ya te has decidido por una de estas, toma en cuenta estos aspectos antes de realizar su instalación:
ELEGIR EL SITIO PARA COLOCAR LA PISCINA
Lo primero que debes haces es seleccionar el lugar donde vas a colocar la piscina en casa, a fin de determinar el espacio disponible. Si cuentas con un jardín o patio, elige un sitio que sea de fácil acceso, que tenga pocas irregularidades y que reciba una buena cantidad de luz solar.
Si vives en un piso con terraza, puedes instalar una piscina desmontable de pequeñas dimensiones. Toma en cuenta la forma de la zona donde la vas a instalar así como el espacio efectivo disponible.
DEFINIR UN PRESUPUESTO
En el mercado vas a encontrar una gran diversidad de piscinas desmontables fabricadas con distintos materiales. Según su resistencia y durabilidad serán más o menos costosas, siendo las más económicas aquellas hechas con plástico.
Sin embargo, las piscinas de plásticos son las menos resistentes y duraderas, mientras que las opciones de resina, madera, acero y aluminio son de mejor calidad. Si cuentas con un presupuesto amplio, la mejor opción son las de madera porque se incorporan al diseño de exteriores de tu vivienda.
SELECCIONAR EL TAMAÑO, LA FORMA Y TIPO DE PISCINA
Puedes encontrar piscinas desmontables muy grandes para varias personas, hasta algunas de tamaño reducido para dos o tres usuarios. Su elección va a estar en función del espacio que tengas disponible en casa para instalarla.
En cuanto a su forma, pueden ser redondas que son las más adecuadas en espacios reducidos, hasta las ovaladas y rectangulares. Las menos decorativas son las de plástico, mientras que las de otros materiales cuentan con revestimientos que simulan piedras u otros materiales y las de madera vienen en distintas tonalidades.
PREPARAR EL TERRENO
Una vez que ya tienes la piscina desmontable más adecuada para tu familia, es necesario preparar el terreno adecuadamente. Para esto, debes eliminar cualquier tipo de piedra u otros objetos punzantes y nivelarlo adecuadamente.
Lo mejor es colocar la piscina sobre una placa de cemento u hormigón que se encuentre perfectamente lisa, ya que le ofrecerá mayor estabilidad. En caso de no ser posible, te recomiendo colocar una capa de arena fina en la zona que nivelaste, a fin de evitar cualquier tipo de daño a la superficie de la piscina.
CUENTA CON LAS HERRAMIENTAS NECESARIAS
No todas las piscinas se instalan de la misma manera y lo mejor es seguir correctamente las instrucciones de los fabricantes. Algunas empresas te brindan el servicio de instalación o asesoría técnica.
Ten a la mano herramientas como destornilladores, llaves finas, cinta métrica y guantes que te faciliten manipular todas las piezas de la piscina. Debes tener especial cuidado con el liner (revestimiento impermeable) tanto al sacarlo del embalaje como al instalarlo, a fin de que no sufra roturas accidentales.
MANTENIMIENTO
Las piscinas desmontables, al igual que las fijas, requieren un mantenimiento periódico para mantener la calidad del agua. Debes contar con un medidor de pH y hacer un seguimiento para que se mantenga en valores entre 7,2 a 7,6.
Para esto, es recomendable agregar pastillas de cloro al agua cada dos a tres días, con lo cual también se evita la proliferación de diversos organismos. Igualmente, recuerda revisar los filtros y mantenerlos siempre limpios.
Fuente: www.elprogreso.es