Muchas personas están siguiendo la nueva moda de las fajas que ajustan la cintura y les da una forma de reloj de arena.
Las celebridades han apostado por esto, y la gente gasta su dinero en ellas y se jactan en los medios de comunicación de sus efectos reductores. La teoría que hay detrás de esta locura es que mediante la constricción del volumen de la cintura, el volumen interno del estómago se reduce, por lo que se come menos, pero lo que la gente no sabe es que esta compresión puede causar problemas de salud. No sólo es doloroso, sino que literalmente están exprimiendo sus órganos!
La compresión de los órganos.
Todos sabemos que el propósito de las fajas es llevarla lo suficientemente apretada para lucir más delgada. Pero, esta opresión deja el estómago, los intestinos y el colon comprimidos. Esto afecta al tracto digestivo, los intestinos se supone que se contraen y se mueven con la comida, pero con compresión el flujo de la digestión se ralentiza o posiblemente incluso podría pararse.
Compresión del intestino.
Las personas con el síndrome de intestino irritable deben tener precaución al utilizar estas fajas. La presión abdominal añadida puede provocar episodios. Pero, cuando usted usa faja irá al baño cada vez que sienta la necesidad? Por supuesto que no! Al posponer la micción, provoca tensión en la vejiga.
“Si pospone orinar, puede causar incontinencia de esfuerzo, causar fugas, o se puede exagerar la incontinencia de esfuerzo a las personas que ya lo padecen.”
Problemas respiratorios.
La respiración superficial es uno de los peores problemas con la formación de la cintura. Cuando una persona inhala, el diafragma se expande, el desgaste de la forma restringe el movimiento causando la obstrucción de la respiración.
Los músculos comienzan a sufrir.
Las fajas sustituyen los músculos! Si los quiere, tiene que usarlos! Muchas personas usan la faja como una muleta para evitar que el músculo haga lo que se supone que debe hacer.
“Médicamente, no tiene sentido que apretando la cintura fuertemente haga que sea más delgado de forma permanente, una vez que se quite la prenda, su cuerpo va a volver a su forma habitual.”
Entumecimiento, hormigueo, dolor en las piernas y coágulos de sangre.
Cuando se abusa de las fajas puede conducir a una condición conocida como meralgia parestésica, es decir, el nervio periférico en los muslos se comprime, lo que lleva a la sensación de hormigueo, entumecimiento y dolor. Disminuye la circulación y también puede conducir a la formación de coágulos sanguíneos. Puede conducir al desarrollo de venas varicosas y congestión de la linfa.
Así que merece la pena correr el riesgo con estas posibles complicaciones el uso de las fajas para cambiar su forma corporal? Tal vez la próxima vez que vaya a usarla pensará en ello.
Fuente: medicinasnaturales.net