Las empresas se mueven gracias al trabajo de sus empleados. Sin ellos nada sería posible. No obstante, muchas veces es difícil alcanzar los objetivos que se plantean. Esto en parte es culpa de una mala planificación. Debes, si tú eres el jefe, buscar estrategias para aumentar la productividad laboral. Muchas personas le indilga la culpa a los trabajadores pero ellos solamente siguen órdenes y sin alguien que los guíe no podrán alcanzar todo su potencial. En el siguiente texto te damos cinco consejos prácticos para que aumente la productividad laborar en tu empresa.
PRIORIZA LABORES
En una empresa lo más importante es la organización. Es fundamental que al empezar el día sepas cuáles son tus prioridades y poder comunicarlas con exactitud a tus trabajadores. Es bueno poner una hora límite para aumentar la productividad la velocidad en el trabajo. De esta manera saldrás de la oficina a la hora indicada y no cuando terminen el trabajo. Planifica, prioriza y verás que en poco tiempo tu lugar de trabajo será todo lo que has imaginado siempre.
SÉ POSITIVO
De nada te servirá ser un tirano o perder la paciencia en los horarios laborales. Te aseguramos que esa actitud solo perjudicará los resultados que quieras obtener. Aunque ser optimista y positivo puede sonar repetitivo y algo vacía ten la confianza de que no es así. Una buena actitud para con tus empleados mejorará en gran medida en ambiente y los resultados saldrán a la vista en menos tiempo del que crees. Ante las dificultades pon buena cara, mantén una buena actitud, esto es algo que se contagiará al resto de tus empleados.
DESCANSA
Tus trabajadores son muchas cosas pero no máquinas que no se cansan. A veces las labores diarias pueden ser muy demandantes y un descanso es la mejor medicina. Un buen líder sabe cuándo es necesario aumentar la intensidad pero también cuándo es necesario relajarse aunque las tareas sean muy urgentes. Deja que las personas a tu cargo respiren, tomen algo, se levanten de sus puestos, esto será muy bueno para ellos y aumentará considerablemente la productividad. Además, tú también puedes hacerlo y liberarte de un poco de estrés.
UNA COSA A LA VEZ
Existe un dicho que reza: el que mucho abarca poco aprieta. Esta es la definición exacta de trabajar en más de una cosa a la vez. Al hacer esto lo único que conseguirás es perder la concentración y reducir la productividad. Sabemos que existen tareas muy importantes pero todas no pueden tener el mismo nivel. Prioriza y desarrolla tu labor de forma concentrada. Tus empleados también se beneficiarán mucho con dicha actitud ya que podrán fijar los objetivos y seguirlos lo mejor posible, no los sobreexplotes.
APRENDE, APRENDE Y APRENDE
Un líder es aquella persona que no se duerme en los laureles. Con esto queremos decir que siempre debes estar en constante evolución. Tu empresa así lo exigirá y los resultados serán visibles. Lee las últimas novedades, mantén tu mente llena de preguntas y luego busca las respuestas, más tarde puedes dar lo que aprendiste a tus empleados y así retroalimentarse. No seas perezoso, eso es lo peor para ti. Este tipo de actitud hará que seas una persona digna de seguir, alguien con el que da placer trabajar y motivará a los tuyos a que hagan un mejor trabajo, a que se superen cada día y aprendan de sus errores.
Fuente: www.alertadigital.com