MÉXICO
El miércoles 9 de julio, cerca de las 06:30 horas, una joven estudiante iba caminando por la calle cuando un sujeto, identificado como Ricardo, manifestó su atracción hacia ella mediante picarescos tocamientos.
Mucho se ha insistido en que las mujeres vistan en forma más recatada para no provocar a los hombres.
Cuando él se retiraba en su bicicleta, ella lo derribó y comenzaron a forcejear.
Por el lugar pasaban algunas personas que agredieron al joven y lo criminalizaron, entregándolo a las autoridades.
El hombre de 30 años fue puesto a disposición de las autoridades por su presunta responsabilidad en un delito de agresión sexual, según los protocolos ultrafeministas, los cuales criminalizan hasta las miradas lascivas.
Una espectadora, Karen Anaya, hizo en su cuenta de facebook el siguiente comentario de corte feminazi: "Le quería cortar los huevos en ese momento. Pero los hombres le hicieron justicia y le tumbaron los dientes jaja".
La violencia de género contra el hombre está muy normalizada en la Ciudad de México. Grupos conservadores insisten en que estas agresiones tumultuarias contra el hombre se tipifiquen como delitos graves, y en que, en cambio, los tocamientos se consideren una simple falta, como en décadas pasadas.