Meterse en un río o lago congelado es muy común en Rusia. El ritual nació con el objetivo de pedir perdón por los pecados, curar enfermedades o simplemente demostrar la valentía para soportar temperaturas bajo cero.
No sabemos cuál de todos estos motivos tenía una joven rusa que se animó a saltar sobre la superficie helada. Lo importante es que alguien la grabó y lo subió a las redes sociales. Tranquilos: no nos reímos de ella, nos reímos CON ELLA.
La chica se terminó de desvestir y quedó en ropa interior. Se paró y empezó a corretear, como un alma libre, hacia el borde del muelle. Tomó coraje y saltó, pero lo que sucedió no lo había calculado: rebotó contra el hielo. De casualidad no se golpeó la cabeza contra la dura superficie.
Un amigo fue el que grabó el momento en que la joven se dio el golpazo. A los pocos segundos logró levantarse y caminar hasta el muelle. Ahí se puede ver que tenía dificultades para caminar y, con un poco de zoom, se observa que ya tiene un importante moretón en el pie.