Los padres de esta pequeña de 3 años la llevaron al hospital debido a una fiebre muy alta. Al no sentirle el pulso, los médicos la dieron por muerta. Sin embargo, al día siguiente, durante el entierro, ocurrió algo que nadie se esperaba. Al ir a cerrar su diminuto ataúd, ¡la pequeña comenzó a moverse! Rápidamente, se apresuraron a sacarla de allí para darle los cuidados necesarios.
Aunque muchos lo están llamando "milagro" y dicen que la niña "resucitó", la explicación más plausible - aunque terrible de cara a la negligencia médica que expone, es que la pequeña nunca estuvo muerta. Aunque no lo explican en el vídeo, lo más probable es que la niña sufriera de un ataque cataléptico debido a la fiebre que la llevó al hospital o a algún tipo de trauma. La catalepsia, de acuerdo con Wikipedia, es un trastorno repentino del sistema nervioso en el que uno puede llegar a perder por completo tanto la movilidad de los miembros como la sensibilidad del cuerpo, de modo que uno puede parecer completamente muerto, ya que, durante el ataque, puede no haber signo vital alguno. Aunque los síntomas no suelan durar más de tres días, lo peligroso de estos ataques es precisamente lo que estuvo a punto de pasarle a esta pobre niña: que te entierren vivo y que te despiertes una vez dentro del ataúd.
Hoy día, los avances tecnológicos hacen casi imposible que ocurra algo así, lo que hace de la negligencia médica en este caso algo mucho más terrible. ¿Qué les pareció esta historia? ¿Qué hubieran hecho en el lugar de la familia? Regálame un EsNoticia si te pareció interesante.